martes, 8 de octubre de 2013

Review: Lords of Waterdeep

Después de un periodo de descanso más dilatado de lo que tenía en mente, volvemos a la carga con un juego salido de las manos de Wizards of the Coast y basado en una de las ciudades más importantes de los Reinos Olvidados de Dungeons & Dragons. No seremos los héroes a los que han contratado para cumplir una misión y salvar la ciudad, seremos nosotros quienes tengamos que conseguir a dichos aventureros para que cumplan las misiones. Hoy jugamos a Lords of Waterdeep.

La inmensa caja del juego con todo ordenadito.

A pesar de estar basado en Dungeons & Dragons se trata de un juego de gestión de recursos con acciones que sólo puede realizar el primer jugador que las elija y no veremos un dado en toda la partida. El objetivo es terminar el octavo turno con más puntos que el resto de jugadores y la principal fuente de puntos son las Quest (misiones). Para superar dichas Quest necesitaremos la participación de un cierto número de cada uno de los cuatro tipos de aventureros disponibles en la ciudad (guerreros, magos, clérigos y pícaros) y dinero. Y dichos aventureros son los recursos a gestionar, lo que sería el trigo, madera o adobe en Agrícola (juego del que ya haremos una review próximamente).

Taberna, aventureros, dinero y misiones...
¿que más se puede pedir?
El tablero consiste en un mapa de Waterdeep con diversos edificios que son los que nos dan acciones como contratar guerreros, seleccionar Quest o ser el primer jugador el siguiente turno. Uno de esos edificios nos da la oportunidad de construir un nuevo edificio entre los 3 disponibles cada turno, que tienen acciones más complejas y, lo más importante, un beneficio para el que los construya cuando otro jugador los utilice. Por ejemplo un edificio nos permite conseguir dos guerreros y un clérigo, pero permitiendo a su dueño elegir entre un clérigo y un guerrero sin necesidad de que él gaste su acción. Además, al principio de cada turno se añade un punto de victoria a cada edificio que se ganará al construirlo. Así, un edificio que al principio de la partida no nos parecía rentable puede ser muy valioso si avanzan los turnos y nadie lo construye, ya que se van acumulando dichos puntos de victoria.

La burbuja inmobiliaria de Waterdeep a punto de estallar
Para jugar las acciones asignaremos nuestros agentes, cuyo número depende del número de jugadores, al edificio correspondiente, bloqueándolo a menos que tenga más huecos para agentes, pero esto sólo sucede en dos edificios iniciales. Hasta aquí podemos pensar que el juego no tiene más interacción entre los jugadores que el adelantarse a lo que hagan para truncar sus planes, pero entran en juego las cartas de intriga. Dichas cartas son de tres tipos: utility (buenas para nosotros y a lo mejor pueden aprovecharlas alguien más), attack (malas para los demás) o mandatory quest (que deben ser la primera quest a resolver por el jugador al que se la "regalemos"). Además, el edificio que nos permite jugar estas cartas se comporta de una forma distinta al resto, ya que cuando todos los agentes hayan sido usados se nos permitirá reasignar los agentes que estén en él por orden de llegada. Así un mismo peón nos ha servido para jugar una carta y realizar otra acción de las que queden disponibles.

Cartas de intriga, le añaden mucha gracia al juego
Para diferenciarnos todavía más de Agrícola, Lords of Waterdeep nos sitúa en el papel de uno de los señores de la ciudad, repartido al azar, que tiene un interés en algún tipo especial de misiones, por lo que ganará puntos extra al final de la partida por cada misión de este tipo que resuelva.

Las verdaderas identidades de los jugadores
Pros:
  • Juego de reglas sencillas, pero con profundidad suficiente al planificar las acciones.
  • Diseño muy cuidado, sobre todo la caja del juego o las bandejas de componentes para que todo quede ordenado.
  • El reparto aleatorio de las personalidades hace que no sigas una estrategia definida y la juegues siempre igual.
Contras:
  • Sólo en inglés y de importación. A pesar de esto, en la bsk podemos encontrar la traducción de las cartas.
  • Acaba de salir una ampliación donde podemos llegar a asumir el papel de un Beholder (Contemplador): Scoundrels of Skullport. Mi cartera tiembla...

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