Valar Morghulis rompedores de tableros, hoy vengo a hablaros de Juego de Tronos, pero no voy a aburriros hablando de lo soporíferos que me parecieron el 4º y 5º libro, ni de lo divertido que fue ver la reacción de los que no lo han leído el libro al ver el capitulo de "la boda roja", sino que voy a abordar el tema desde la perspectiva que nos toca, la de los juegos de tablero.
Para el que aun no lo sepa, Juego de Tronos (Canción de Hielo y Fuego) es una obra de George R. R. Martin, un señor el cual es capaz de hacer sufrir a sus lectores de una forma nunca vista, y no hablo de su narrativa, sino porque cada vez que le vemos decir cosas como "que rico el cordero a la estaca" y vemos su actual tonelaje pensamos que ese bocado va a ser el último.
Poniéndose como el tenazas |
Martin con toda la cara de perro mirando chuletón |
No, no se trata de la escena de Obelix comiendo los platos de Mannekenpix, el cocinero de los titanes. |
La triste historia comienza hace unos años (batallita del abuelo "incoming", buen momento para hacer pis o cerrar la ventana directamente) cuando empieza a darle a todo el mundo por leer los libros, a mi incluido, no me considero el típico cultureta de "yo leí Juego de Tronos cuando no era famoso y ahora que lo lee todo el mundo no me gusta porque es muy comercial". El caso, que como buen grupo de polifrikinomanos™ que somos no tardamos en caer en las redes de dicho juego. Al principio todo era felicidad, alegría, risas, chapoteo, saltar de la mano por el campo, algún spoiler perdido que otro en las cartas como "¿Que hace Daenerys con 3 dragones del tamaño de Falete?", nada importante, en definitiva eramos mas felices que los niños que viven en Casa Tarradellas.
El drama comienza cuando a los oxidados engranajes de mi cerebro les da por funcionar y comienzo a ser consciente del frenético ritmo de expansiones que toma el juego, un capitulo al mes, transformándose el seguir al día en el juego en una hipoteca mensual. Si a esto le sumamos que el grupo de juego se movía menos que Stephen Hawking en un guateque, dio como resultado que terminaron las cartas desterradas al fondo del cajón del cual no se movieron hasta el día que decidí librarme de ellas dándoselas a un amigo.
Los de Fantasy Flight Games viendo que el juego lleva ya la de "redios" vendiéndose y en lugar de sumar jugadores los están pierdiendo, puesto que para poder enganchar nuevos jugadores la inversión que tienen que hacer da unas cifras que me da miedo calcular. Ni cortos ni perezosos, se deciden a hacer la versión "casual", Juego de Tronos versión HBO, que no deja de ser un refrito del juego anterior, pero más simple y con imágenes de la serie, vamos un negocio redondo.
Pa que pensar un juego nuevo si podemos simplificar uno que ya tenemos |
Ponemos fotogramas de la serie y no tenemos ni que contratar dibujante |
Es un juego de estrategia en el cual de 3 a 6 jugadores tomarán el control de una de las grandes Casas de Poniente. Como no podía ser de otra forma, cada Casa se cree que es merecedora del Trono de Hierro, así que toca darse de tortas hasta quitarle esa idea de la cabeza al resto.
En lo respectivo al sistema de juego las opiniones son dispares, mientras que algunos piensan que es una obra maestra, otro sector piensa que el juego esta descompensado según que Casa controles. Personalmente, solo puedo decir que no tengo el suficiente número de partidas encima para emitir un veredicto fundamentado sobre este juego y todas las opiniones de las que os hablo son de la primera edición del juego, pero si seguís interesados en saber algo más sobre el mismo, me remito de nuevo al vídeo tutorial que además de didáctico me quita a mi de escribir.
No me gustaría cerrar este "Breaking Deep" sobre Juego de Tronos sin hablaros de Cyvasse, un juego de tablero similar al ajedrez (salvando las distancias) al que juegan los personajes del libro. Pues bien, Arian Croft y Nate Stephens, dos personas con mucho tiempo libre y una impresora 3D, han creado el reglamento de Cyvasse basandose en la información recopilada en los distintos capítulos de los libros en los que se hace mención y completándolas con reglas de otros juegos de la época medieval que George R. R. Martin cito como inspiración durante diferentes entrevistas. Por si todo esto fuera poco han modelado en 3D las piezas y las ponen a disposición de todos junto con las reglas del juego de forma totalmente gratuita. Pena del excesivo precio de las impresoras 3D, pero algo es seguro, si algún día me hago con una, esto será de las primeras cosas que haga.
Para concluir, me gustaría hablar de un rediseño del juego Love Letter basado en Juego de Tronos que podemos encontrar en 2 maracas D10.
Para el que no conozca Love Letter, es un juego de 2 a 4 jugadores, de solo 16 cartas con reglas sencillas y muy dinámico. Con la única pega que la ambientación de enviarle cartitas de amor a la princesa a mi al menos no me termina de gustar, pero con el rediseño de Juego de Tronos el juego mejora sustancialmente. Por experiencia propia os puedo decir que es un juego perfecto para llevarlo siempre encima (no pesa nada), ideal para sacarlo con los colegas mientras te tomas una cerveza bien fresquita.
Pues hasta aquí esta primera edición de "Breaking Deep", creo que a lo largo del post hicimos un buen repaso de juegos basados en Juego de Tronos, pero la red es infinita al contrario que mi conocimiento, así que si sabéis alguno más o simplemente queréis opinar sobre lo que os pareció este artículo, no dudéis en decirlo, estaré encantado de leer vuestros comentarios, Valar Dohaeris.
Genial! Gracias por el artículo. No sabía que había varias versiones e incluso uno gratuíto. También hay una versión online. Yo tengo el de Fantasy Flight Games actualizado, y me creía que solo esxistía ese.
ResponderEliminar